Fujifilm X-Pro3, no es más de lo mismo

Hace bastante que no escribo en este, mi blog. Podría deciros que a partir de ahora la cosa va a cambiar y que en lo sucesivo pasaré por aquí más... no lo haré, os estaría mintiendo ya que no sé cuando volveré a escribir. Dispongo de poco tiempo,  de hecho esta entrada lleva más de tres semanas rondando en mi cabeza, concretamente desde que terminé de probar la X-Pro3... pero no me ha sobrado tiempo. 

En el vídeo que encabeza esta entrada, podéis ver el resumen de la toma de contacto que realicé para FOTOCASION de esta cámara. Y aunque en esencia no os voy a decir nada nuevo en este artículo, si quería redactarlo para poder explicar mejor algunas de las ideas que lanzaba en el vídeo. 

A nivel técnico podemos encontrar en muchos sitios las especificaciones técnicas y sí, en resumen esta X-Pro3 le da hasta en el paladar a la X-Pro2. Es superior se mire por donde se mire. Pero más aún, es superior en aspectos que se aprecian antes de comparar tranquilamente los resultados de una y otra. La X-Pro3 es mucho más rápida, y no me refiero al AF (que lo es), sino al manejo general de la cámara, a la forma de moverse por sus menús, la agilidad con la que se aplican los cambios en las opciones etc... Es esa sensación de tener una cámara más moderna. 

Mi querida X-Pro1, que a día de hoy sigue haciéndome disfrutar como un enano

Uno de los tópicos de la serie X-Pro es que nunca fueron cámaras excesivamente rápidas (ni lo necesitaban para el usuario medio de las mismas) si bien la X-Pro1 era extremadamente lenta y la 

X-Pro2 situaba a esta generación como una cámara aceptablemente rápida... esta X-Pro3 sí es una cámara rápida, hecho podríamos decir (de forma muy general) que los señores de FUJIFILM han metido su genial X-T3 en el cuerpo de la X-Pro2. 

Si esta pretendiera ser una "prueba" que se limitara a valorar aquello que se puede reflejar con precisión en un papel, el artículo estaría finiquitado. Pero no es así, ese nunca ha sido el espíritu de este blog y ahora no vamos a cambiarlo. 

Bien, ya queda claro que es una cámara que esta a la "última" y que puede mirar de tú a tú a su hermana la X-T3, al menos sobre el papel. 

Pero... ¿sabéis lo que os digo? Que eso me da completamente igual. 

Sí y tengo la sensación de que no es solo el sentimiento que tengo respecto al uso que la daré (sí teniendo una X-Pro1 y una X-Pro2... caerá una X-Pro3) sino que esta cámara no te pide ni invita a que utilices su potencial en la mayoría de ocasiones y es que si tu objetivo es exprimir las posibilidades de esta cámara, te recomiendo que apuntes hacia la X-T3, una cámara mucho más práctica pero que no te dará ni por asomo la experiencia que te ofrece esta X-Pro3. 

Mi X-Pro2, con el parasol que utilizo en mi 18-55

La X-Pro3 te invita a olvidarte de la cámara. En el vídeo comento este punto, pero aquí puedo extenderme mucho más. Y es que no soy una persona que toque mucho la cámara cuando salgo a hacer fotos, lo tengo claro el 80% de mis fotos son en prioridad de apertura, con una simulación para toda la sesión y poco mas... ¡o eso pensaba yo! Y es que la primera vez que salí con la cámara me di cuenta de la cantidad de veces que instintivamente buscas revisar una foto, modificar un parámetro... 

"Picas" una, dos, tres veces... pero a la enésima ocasión te olvidas dejas la cámara colgada al cuello o en la mano y sólo piensas en buscar la foto y eso, señor@s es algo tan básico y simple como poco común hoy en día. Sí, las cámaras de hoy en día ofrecen tanto, que para la mayoría de nosotros son inacabables. He de confesar que creo que en mi X-Pro2 nunca he utilizado la doble exposición y me atrevería a decir que ni la ráfaga salvo el día que la estrené para comprobar que todo estaba OK. 

Quizás por eso esta X-Pro3 me ha parecido la cámara mas apetecible de todas las que he probado en los últimos años, no es la mejor técnicamente, ni la más avanzada, pero ofrece algo que ni su hermana la Pro2 me dá y es el "obligarme a estar a lo importante" la fotografía. 

Es fácil decir que eso mismo puedes hacer con la Pro2 (por semejanza en el carácter de la cámara) pero es falso. Si tienes la posibilidad terminas por vaguear y caer en la tentación de lo digital. 

En mano, la he sentido igual, pero diferente, ésta es algo más cómoda aunque no es una diferencia determinante. 

Para mí a esta cámara le sobran el 70% de las posibilidades que ofrece, lo que no significa que molesten o no me guste saber que están ahí, ya que la hacen una cámara mucho más todo terreno, pero seamos sinceros, esta no es una cámara para calzarla un tele largo, o clavar la ráfaga sesión tras sesión. Esta es una cámara para utilizar esos increíbles objetivos fijos de Fujinon y salir a disfrutar el mero hecho de fotografiar. Y si esa degustación pausada del fotografiar estaba muy cuidada en las anteriores Pro en esta es la auténtica y única protagonista. 

Pruebo muchas cámaras a lo largo de los días, en parte ese es mi trabajo. Hay cámara que he tenido la suerte de utilizar que me han encantado por que veía su potencial, lo bien hechas que estaban e imaginaba a cierto perfil de fotógrafo sacando el 160% del modelo en concreto. Pero solo dos cámaras en los últimos 3-4 años me han hecho sentir mariposas y esta X-Pro3 es una de ellas, la que más. 

Y es que en el momento actual, la diferencia en cuanto a sensaciones (olvidándonos del ámbito profesional donde a veces se necesitan especificaciones concretas para poder atender los encargos) no la marcan 20mpxl más o menos en el sensor o el grano es más o menos que el modelo de la competencia a cierto valor, el suelo de las cámaras a las que tiene acceso el usuario medio hoy en día esta tan alto que los mínimos necesarios están cubiertos con creces. Lo que quiero, lo que queremos los aficionados, son cámaras que nos enamoren, que nos ilusionen... no queremos más de lo mismo. Y esta X-Pro3, no es más de lo mismo.