Sobre el estilo en Fotografía

Se dice de los grandes fotógrafos de la historia que tenían (o tienen que no quiero cargármelos a todos) un estilo propio. Tener un estilo definido y diferenciador en nuestra manera de hacer fotografía es algo que todos buscamos, unos con más éxito que otros. Pero quizás en fotografía la manera de obtenerlo es diferente al de otras artes gráficas...

¿De qué va eso del estilo en el arte?

Para simplificar, se podría definir como una serie de características comunes en las diferentes obras de un mismo artista, éstas serían (más o menos) únicas y personales y hacen que su obra sea fácilmente identificable. Además son rasgos reconocibles independientemente del tema, de la técnica o del contexto de la obra. 

Me explico... Si miramos un cuadro cualquiera de Van Gogh (por poner un ejemplo) lo podremos identificar como tal, incluso sin entender mucho de arte, porque tiene un estilo y características propias que sólo Van Gogh posee. 

Podemos decir incluso que... A partir de la forma que tiene Van Gogh de pintar un cuadro cualquiera (por ejemplo un bodegón), podemos llegar a identificar otro cuadro suyo de otro tema diferente (por ejemplo un paisaje).

Y podemos ir un poco más lejos aún, a partir de ver cualquier obra de Van Gogh podemos imaginar cómo pintaría cualquier otro cuadro de cualquier otro tema... Porque tienen un estilo propio...



Lo que quiero decir es que (normalmente) cuando se dice que un artista tiene un estilo propio, este es totalmente identificable, independientemente del tema, material o técnica usados. Cada uno tiene un sello que va más allá de su firma (aunque sea eso lo que se paga en muchas ocasiones).

Un artista gráfico con estilo propio tiene una forma de dibujar o de pintar o de modelar o de esculpir única (puede ser imitada, pero no dejará de ser única), los movimientos de sus manos y de sus pensamientos quedan grabados en su obra de una forma determinada... Cada artista impregna su obra de sí mismo, de una manera bastante directa, a través de sus movimientos y pensamientos, es algo vivo e instantáneo y muy personal.

Pero en Fotografía no ocurre así...

En Fotografía, al ver la imagen de un paisaje que ha capturado algún fotógrafo no somos capaces de imaginar cómo fotografiaría un bodegón. De hecho, lo más probable es que fotografiaría de manera totalmente diferente un paisaje de como haría un bodegón o un retrato.

Fotos del gran Cartier Bresson, pero con diferente tema

Cuando somos capaces de reconocer un estilo en un fotógrafo, una manera de hacer las cosas es cuando miramos obras dentro de un mismo tema, es decir, todos los retratos del mismo fotógrafo pueden tener un estilo identificable, o todos los paisajes, o todos los bodegones... entre sí... pero los retratos no se parecen a los paisajes ni los paisajes a los bodegones.

Fotos del gran Cartier Bresson, sobre el mismo tema

Es probable que seamos capaces de encontrar una similitud (un estilo), entre los diferentes temas, en el caso de que la iluminación, el revelado o el retoque tenga unas características determinadas, más o menos obvias y diferenciadoras, pero fíjate que son cosas "creadas" o modificadas o añadidas por el autor.

Creo que esto es así "por culpa" de la herramienta que usamos para la primera parte de nuestro trabajo como fotógrafos, la cámara. Es una herramienta tecnológica, demasiado fría, lo que "pinta" no sale directamente de nuestras manos, ni de nuestros movimientos, ni de nuestra imaginación, "capturamos" algo que estaba allí, que existe, lo "copiamos" tal y como es desde el punto de vista en el que nos encontremos... Y después, en la edición, lo modificamos... o no.

Si no queremos quedarnos en lo documental, creo que debemos considerar que la fotografía que tomamos (sobre un tema determinado) es el esbozo sobre el que después vamos a trabajar y dotar de nuestro sello.

Por lo tanto para tener nuestro estilo hay varias cosas que se tienen que cumplir.

Dónde está entonces nuestro estilo (fotográfico)...

Aquí viene mi teoría, que desde luego, puede estar totalmente equivocada (te invito a debatirla en los comentarios)...

Deberíamos decidir sobre qué tema queremos realizar fotografías. De entre todo lo que fotografiamos, de todas las fotos que hacemos o que nos imaginamos hacer, ¿cuáles son las que más nos gustan?¿con cuáles disfrutamos más al hacerlas?¿cuáles nos transmiten más al verlas? Como alguna vez leí y alguna vez he dicho, debemos fotografiar lo que amamos o lo que odiamos, pero debemos sentir algo por ello. Si lo encontramos ya tendremos determinado una porción de nuestro estilo.

Pero el tema a fotografiar es la primera parte del trabajo, la segunda es fotografiarlo de una manera personal, tratando de mostrar nuestra manera de hacer las cosas, o mejor dicho, nuestra manera de verlas. Evitando imitar encuadres, iluminaciones y composiciones ya muy "machacados".

Lo tercero sería el revelado. Es la parte que debería ser más subjetiva de todo el proceso, a no ser que seamos fotoperiodistas. Además es donde más podemos marcar un estilo y diferenciarnos del resto. Quizás nos gusten las fotos muy contrastadas, o poco, o muy saturadas o poco, o con un leve tono azul en las sombras, no sé, para gustos colores, por eso precisamente digo que es donde más podríamos marcar diferencias.

Y por último... ser fiel a nosotros mismos y a nuestra manera de hacer las cosas. No importa que nuestras imágenes sólo nos gusten a nosotros, porque somos la única persona cuyo criterio realmente importa, nadie vive y siente por nosotros. Si no sentimos nada por nuestras fotos... ¿qué nos hace pensar que alguien más va a sentir algo por ellas?... Aunque mi opinión en este punto ya lo dejé claro en la anterior entrada que escribí para este blog.

Pero no nos obsesionemos

De todas formas no debemos obsesionarnos demasiado en encontrar nuestro estilo, lo más probable es que nos encuentre él a nosotros. Debemos seguir haciendo fotografías, aprender bien la técnica, aprender de nuestros errores, ser nuestros más feroces críticos. Pensemos qué nos gusta más fotografiar. Con el tiempo haremos (probablemente) menos fotos, porque seremos más selectivos, ya que acabaremos fotografiando sólo las cosas por las que sentimos algo (amor, odio, pena, admiración...) Habremos encontrado, sin darnos cuenta, nuestro tema, con lo que ya tendremos parte de nuestro estilo definido.

Después, o mientras tanto, aprenderemos técnicas de iluminación, revelado, procesado y retoque, todas las que podamos y lo más pulidas posible, para tener muchos conocimientos y un buen abanico de métodos de trabajo. De entre todas ellas acabaremos usando en mayor medida las que más vayan con nuestra forma de ver.

Posiblemente, todo eso es lo que ya está pasando. Sin darnos cuenta y de forma natural estamos definiendo nuestro estilo fotográfico... o artístico, si lo preferís ;)

Redactado por:

Pirata Larios
Me llamo Carlos Larios, aunque todos me llaman Pirata (pero con cariño), soy Diseñador Gráfico, Ilustrador, Fotógrafo y Padre (entre otras cosas)... además de especialista en exprimir el tiempo para cumplir con todo lo que implica ser lo que soy y hacer todo lo que deseo hacer.

Twitter: @piratalarios   BLOG: www.fotolarios.es