viernes, 6 de mayo de 2016

¿Soy menos fotógrafo porque no disparo en manual?


Llevo ya muchos años en el mundo de la fotografía. Tanto como aficionado como profesional. Y como bien sabéis me encanta. Y puedo decir sin miedo que muy pocas veces expongo en manual. Seguro que algunos se llevarán las manos a la cabeza y otros seguirán su camino. Pero veamos por qué existe la idea de que si no lo haces todo tú mismo eres menos fotógrafo.


En muchas reuniones, en algunos cursos, en demasiados foros y en unas pocas reuniones privadas este tema siempre sale. Y hay dos posturas enfrentadas. La primera es que sólo es fotógrafo aquel que con una cámara cualquiera es capaz de acertar a la hora de medir la luz y conseguir en la copia final el resultado que había visualizado, sin ayuda de fotómetros ni nada. A pelo, como se afeitaban en el oeste.

 La segunda postura, en la que me coloco, defiende que podemos exponer con el modo que queramos, siempre y cuando los resultados sean los apetecidos. Y que ni mucho menos eres menos fotógrafo por decirlo o hacerlo.

El fotógrafo manual


La postura del fotógrafo manual se esconde en los albores de la historia, cuando las cámaras no tenían ni obturador y la exposición dependía de lo rápido que pusieras la tapa del objetivo. Muchos presumen de saber ver la luz. De hacerlo a ciegas.

En la mayoría de los casos son unos privilegiados, como la gente de campo que miraba el cielo y sabían si a esa misma hora iba a llover el día siguiente. Realmente es la voz de la experiencia. Ven la escena, deciden la velocidad de obturación, ajustan el diafragma y la imagen les sale. Esto es porque lo han hecho millones de veces antes de dejarnos boquiabiertos.

El problema es cuando ves a gente que se da importancia cuando presume de esta forma de trabajar, y poco menos que te desprecian si ven que tienes puesta la rueda en Av, o mucho peor para ellos, en la odiada P.



La verdad es que envidio sanamente a estos monstruos de la naturaleza fotográfica por no depender de exposímetros, el fotómetro de la fotografía, y confiar ciegamente en sus visión. Además antes era más arriesgado, pues sólo sabían que habían acertado cuando revelaban el negativo, ya lejos del lugar fotografiado.

Lo que si es verdad es que muchas veces he preguntado a algunos de estos usuarios y la respuesta me ha dejado helado. Realmente no saben lo que hacen. Juegan con el ensayo error hasta límites insospechados. Su vida fotográfica es una pura ruleta.

Unos pocos me contestaron que empezaron con la famosa regla del f16, la misma que aparecía en los cartones de los carretes que tirábamos sin miramientos. Ese es el mejor modo de empezar a trabajar en manual. Y luego con la experiencia ni lo piensas. Te sale y listo.

La regla del f16, que muchos desconocen decía que en un día despejado podías disparar a f16 y con una velocidad que fuera la inversa del ISO de tu carrete. Así si tenías un carrete de 100 ISO, ajustabas la velocidad a 1/100, o en su defecto a 1/125. Si aparecía una nube que tapara la luz del sol sólo tenemos que abrir el diafragma a f11 o poner una velocidad más lenta para compensar la bajada de luz.

Y esta es la forma en la que muchos han llegado a dominar la exposición manual y el conocimiento de la ley de la reciprocidad, según la cual podemos ajustar el par de exposición para conseguir exactamente el mismo valor de exposición pero con una profundidad de campo distinta.

El fotógrafo libre


El fotógrafo libre es aquel que utiliza el sistema de exposición que mejor le venga en cada situación, sin poner puertas al campo y sin juzgar a los demás por lo que hacen. Piensa que la tecnología ha avanzado lo suficiente como para confiar en ella. Y sobre todo la entiende para sacar el mejor provecho de cada uno de los modos de exposición. Y que cada uno trabaje como quiera.

Yo me sitúo en esta parte de la discusión, como he señalado al principio. He llegado a utilizar el modo P, y no por ello considero que soy menos fotógrafo. El secreto es saber cómo funciona cada uno, entender cómo mide la luz, y lo más importante dentro de la fotografía digital: leer correctamente el histograma, para mi el mayor adelanto de la nueva era fotográfica.

La mayor parte de mis fotografías están hechas con el modo Prioridad del diafragma. En función de la profundidad de campo que busco, abro o cierro el diafragma y dejo que la cámara me diga la velocidad de obturación. Eso sí, tengo en cuenta dónde tengo que medir y juego con la compensación de exposición para buscar un buen histograma.



Y sí, muchas fotos las hago en P. Diría que todas las que hago con mis compactas. La idea es actuar rápido. Confío plenamente en mis máquinas. Pero como siempre, todo depende de dónde mides la luz y jugar con la compensación de exposición para decirle que lo que está midiendo seguramente no tiene una luminosidad gris, sino que será más oscuro o más negro. Básicamente es confiar en lo que dice el histograma y lo que te dicta la experiencia.

Y por supuesto también disparo en Manual cuando trabajo en estudio. O cuando estoy en medio de la montaña con mi trípode y tengo todo el tiempo del mundo para mi...

Pienso que algo como la exposición no debe definir al fotógrafo y que es un tema que deberia dar igual. Son sus fotos las que deben hablar por él. Helmut Newton trabajaba en Automático, como confesaba en sus documentales, Cristina García Rodero hizo su trabajo más importante con el fotómetro estropeado, James Natchwey iba siempre con el fotómetro en el bolsillo y medía la luz cuando veía que cambiaba... ¿qué más da cómo se expone mientras los resultados hablan por sí solos? ¿Vosotros qué pensáis?




8 comentarios:

  1. Excelente entrada Fer, me he encontrado con muchos fotógrafos que por su obsesión por el manual (y dejar el fotometro en CERO... ¿?¿?¿) terminaban por no trabajar apenas otros aspectos. El último párrafo con esos nombres lo deja bien claro...

    ResponderEliminar
  2. Yo creo que esos debates entre fotógrafos van más orientados a si un fotógrafo es "más profesional" por disparar en manual que uno que dispara en automático. Y creo que se nos ha ido un poco de las manos el concepto.
    Como bien dices, cada momento requiere una acción. Hay momentos en los que prima la rapidez de disparo y no puedes tirarte tres horas para encuadrar, medir luces, enfocar a mano...porque pierdes el monento de la foto.
    Si tu trabajo, tu forma de vida, es la fotografía, dejas de ser profesional por disparar en automático? Y cuando en la siguiente foto que haces disparas en manual, entonces vuelves a ser profesional?
    Creo que lo que debemos es ser honestos nosotros mismos y saber distinguir que no por disparar de una forma u otra o hacer mejores o peores fotos somos mas o memos profesionales, sino cómo vivimos la fotografía, ya que al igual que una madre que pone el termómetro a su hijo enfermo y le administra un medicamento no es enfermera por el mero hecho de llevar a cabo una acción que haría una enfermera profesional, una persona que dispara una cámara fotográfica, sea en manual o en automático, cuando viaja o asiste a un evento de forma ocasional, no se le puede considerar fotógrafo profesional.
    Pero cuando haces de la fotografia tu modo de vida, que más da cómo obtengas la imagen? La cuestión es conseguirla echando mano de todas las herramientas que tengamos a nuestro alcance y si puede ser con la mínima complicación, mejor. Más tiempo tendremos para desarrollar nuestra pasión.

    ResponderEliminar
  3. Muy buena entrada :) ... aunque soy de los que trabajan en manual y tengo mis propios sólidos argumentos para ello, tampoco creo que sea algo que defina a nadie como mejor o peor fotógrafo. Al igual que se pueden hacer buenas fotos con cualquier cámara (pues esta es sólo una herramienta), se pueden hacer buenas fotos en cualquier modo de manejo (porque es sólo una parte de esa herramienta) ;)
    El caso es que enhorabuena por la entrada.

    ResponderEliminar
  4. Muy buena!, yo solo trabajo en Manual cuando estoy en estudio. Fuera mantengo el ISO en automático, eso si controlo la velocidad y el diafragma, y la rueda de compensación. Es como más me gusta, porque con esos dos parámetros controlo también el aspecto de mi imagen, por profundidad de campo y por controlar la estela de los posibles movimientos en la escena. Gracias a los sensores de hoy, esto es muy factible hoy. Antes el ISO era un poco el que dejabas fijo, ahora me olvido de el entre 100 y 6400.
    Enhorabuena por el artículo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Asi es exactamente como trabajo yo el 90% del tiempo. Es cierto que puedo cambiar a manual en alguna ocasión puntual pero con lo que me soporta el ISO prefiero preocuparme de apertura y obturación (es decir, la parte creativa) y dejar que la cámara me ajuste el ISO. Francamente, lo de manual debía ser antes (y yo he sido mucho de medición puntual, exponer a la derecha, etc) pero francamente, a día de hoy la cámara hace un trabajo excelente sin nuestra ayuda.

      El único momento en que sigo usando manual por supuesto es en tripode cuando tengo todo el tiempo del mundo y estoy haciendo una larga exposición o similar.

      Eliminar
  5. Buenas...
    Muchas gracias por vuestras palabras. Es un tema que siempre ha generado polémica y nunca lo he entendido. Algunos me han mirado por encima del hombro por confesar que disparaba en prioridad al diafragma...

    ResponderEliminar
  6. Amen. Sí señor, tiene usted toda la razón. Este mundillo está lleno de dogmatismos y va siendo hora de acabar con ellos. Personalmente suelo trabajar con prioridad a la apertura del diafragma para controlar la profundidad de campo, pero no dudo en utilizar otras prioridades, incluso el manual o el automático, cuando las circunstancias lo aconsejan.
    Un saludo,

    ResponderEliminar
  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...