Los "¡AY!" de la fotografía

...esa tarjeta llena "¡AY!"...

Si, no  nos engañemos, todos hemos recurrido a ese ¡AY! en algún momento.

Hace ya algún tiempo, dedique una entrada a algunos puntos que merece la pena no olvidar y que a modo de "capón" para nosotros mismos recordaba en la misma.

Esta entrada, es otro listado de esas pequeñas cosas, que precisamente por ser "obvias" muchas veces se nos olvidan... lo que puede dar al traste con nuestra salida fotográfica, al menos en el momento en el que exclamas ¡AY!

Así pues, estoy seguro que te vas a sentir identificado con alguna de estas situaciones....
Los "¡AY!" de la fotografía:


¡AY!... se me ha olvidado cargar la batería. Esta creo que alguna vez nos ha pasado a todos. Y da igual que tengas varias baterías, a veces uno sale con lo mínimo suponiendo que la cámara esta cargada y al encender la cámara... sorpresa. La batería esta "seca". Ni que decir tiene que, por supuesto, en ese paseo dominguero en el que has salido a pasear (literalmente) la cámara, te parecerá que has perdido la que podía hacer sido tu mejor foto hasta la fecha.

...da igual las que tengas, siempre hay un día que sales con la "puesta"...

!AY!... La tarjeta esta llena. Esta es si cabe aún más desesperante que la anterior. Generalmente esas fotos que ocupan el espacio que necesitamos no las hemos pasado al PC. ¿formateas, esperas a encontrar un lugar donde comprar otra tarjeta...? mientras te decides, sientes que estas perdiendo cotinuamente "fotones".

!AY¡... La zapata del trípode. Si se te ha olvidado. Y esta en concreto es la última que me ha pasado hace unas semanas. Salí con trípode y cámara con un solo objetivo y una batería de repuesto. Las zapatas de todos los trípodes y monopodes que utilizo son iguales, es algo que tuve claro en su momento... buscar la total compatibilidad de las rótulas y sistemas. Así cogí el trípode pequeño en su funda y salí sin mirarlo, confiando en que alguna de las varias pastillas estuvieran montadas. La sorpresa fue que ninguna de las 5 lo estaban... se acabo la alegría.

!AY!... La cremallera. Si, todos alguna vez hemos cogido la mochila o bolsa del suelo sin que esta estuviera cerrada. Lo que suele venir después es el dolor del golpe que reciben los objetivos o el cuerpo de la cámara. Suele ser un error que se comete pocas veces. La lección se aprende casi de forma inmediata.

!AY!... Quite el objetivo sin apagar al cámara. Aunque por defecto las cámaras suelen apagarse o entrar en modo de suspensión, en algunos modelos es posible habilitar el disparo sin objetivo reconocido (para utilizar objetivos manuales por ejemplo), con lo que en este caso el "dolor" que se produce es sicológico, pensando cuanto polvo habré dado de comer al sensor por ejemplo... La verdad es que esto no es para tanto. Bueno excepto si lo haces en medio de una tormenta de arena o tifón... en ambos casos si existe "alguna" probabilidad de que no sea lo mas adecuado :-).

¡AY!... No apreté a pata del trípode. Con su vertiente, no lo estabilicé. Esta es otra de esas lecciones que se aprenden rápidamente. Ya sabes donde es posible que termine la cámara.

¡AY!... He disparado con enfoque manual o con el punto de enfoque seleccionado mirando a Cuenca. Esto suele descubrirse tras lanzar varias fotos y que todas estén fuera de foco en el lugar deseado. En ese momento un "¡Eres grande chaval/a!" suele invadirte por dentro.

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