Nueva York es un paraíso en muchos sentidos, y para el fotógrafo una oportunidad continua de capturar momentos únicos. Bien sea como paisajista urbano o en la disciplina de fotografía callejera, es tal la cantidad de estímulos y oportunidades que uno se puede llegar a sentirse incluso abrumado.
Como en todo viaje, si se ha ido antes al destino, el fotógrafo puede "aprovechar" aun mas si cabe sus sesiones. En el caso de esta ciudad, las referencias son solo arquitectónicas con sus grandes "hitos", pero el resto de la ciudad parece reinventarse a cada momento.
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En este video os dejo parte de una se las sesiones que realice en Central Station, en la que el movimiento y constante cambio de actores, suponen una tentación constante de "disparar" y a la vez un reto para conseguir tomas "limpias". Un ejemplo de las fotos que de momento puedo mostrar. Viaje del que he hablado en esta entrada.
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